lunes, 7 de diciembre de 2015

Inspiradora

Insospechada carencia narcótica: ¿dejaste tus efluvios de elixires tras la marea del rocío? Es tu despliegue una demostración de pureza escéptica? Dónde el sol concentró sus aromas infundidos si ahora yaciente no te entregas sin sufrir?

La profusión florida esconde el secreto de los aceites embriagadores de la infancia.



lunes, 30 de noviembre de 2015

Grotezco urbano. Colección "Cuentos" Ed. Dunken.

Grotezco urbano

Sueños corruptibles se cuelgan de los raquíticos árboles de la ciudad castigada por el polvo de sensaciones perdidas, la ausencia de esperanza y el desgarro de los pobres. Solo hace falta levantar la vista hacia el futuro para diagnosticar un mar de almas desahuciadas implorantes de justicia, anhelantes de historia.
Un niño camina solo al costado del cordón de la vereda, llorando, buscando su lazo maternal negado. La madre no lo busca ni lo llama.  A media cuadra desborda el griterío excéntrico de las bromas picantes, de los chistes subidos de tono y las guarangadas a la salida de la escuela. Paisaje que se reitera puertas adentro, donde un suburbio de intenciones educativas se desnudan en carcajadas grotescas, salidas de un infierno de voces alteradas, griterío y necesidad de exorcizar las tensiones de la jornada.
Un grito ahogado y la estampida. El Renault destartalado y la jauría. Barricada de la chusma agolpada, escandalizada. Con la muerte de la sensibilidad se asoma el rictus cotidiano, naturalizado. Un espasmo de vida cruzó el barrio, se asomó a la sala de maestros, dio vuelta la esquina y finalmente sobrevoló y se posó sobre las entrañas latentes del origen, para alertar la tragedia. 
Los caballos pasan al trote de un semáforo de advertencia que dice urbanidad maltrecha  de “gurices” abandonados y  “guachos” impertinentes. Respeto de una sociedad pervertida por el desencanto, la ignorancia e indiferencia. El suburbio donde vivo pide permiso a la vida para remontar los rayos del sol que cubren el verde amarillento del campo mezclado con la basura maloliente.

jueves, 5 de noviembre de 2015

Primaveral

Y en el renacer anual la desesperanza acontece. Parecería que el gris del tiempo derrota mi Alegría y que las flores de tu amor han muerto bajo la mata creciente de la vida pero un dia los colores tomaron forma y tu luz se hizo espacio en la oscuridad y yo volví a brotar bajo la luz del Sol.

Sangre matancera

Aquel que resiste y se hace fuerte en marcar la diferencia, aquel que florece ante los embates sin nutriente alguno ni asistencia externa, aquel que se la banca solito. Sin mendigar siquiera un mendrugo de pan ni un vaso de agua, aquel heróico, es el hermoso estandarte de un pueblo que florece pese a la desidia..
Desde las entrañas del conurbano bonaerense implorantes reclaman elevando sus ruegos a un futuro cargado de incertidumbres.





Av. Pedro Russo, González Catán., Villa Scasso, Partido de La Matanza, Buenos Aires, ARGENTINA , (por si alguien lo olvidó, no lo recuerda o se hace el distraído )

miércoles, 7 de octubre de 2015

Encuentro natura



Mirar hacia la derecha. El sol que se refleja en las piedras tornasoladas, grises con sus vetas blancas anuncian los tesoros que se esconden en las entrañas. Vetas que denuncian un pasado, el cercano mundo en el cual sólo los árboles constituían la presencia oportuna de los tiempos. Y el sol, fiel testigo del deseo deja entrar el plateado de la vida acuñada en su savia. El vuelo rasante se lleva consigo los pétalos amarillos, latentes del efímero insecto. Otras voces se escuchan a lo lejos, risas y juegos que peligran en el incesante y rítmico canto del agua que corre. Corre! Corre! Se escucha a lo lejos y los risas dejaron paso al maullido confuso del ave que quiere ser felino.
Mas acá el deseo del ser Se entremezcla con el cantar de la cascada. Los verdes te embriagan y el reflejo del sol baja por el horizonte serrano. La luna da sus primeros pasos y el frescor de la tarde enluta el brillo, celeste, celeste, caprichosamente infinitamente celeste del cielo límpido. Bufar de seres añorados cuyas voces se cuelan en el bosque. Qué será de tí querido que esperas el cariño de tu amo dependiendo todo tu absoluto ser del mismo
Imposibilitada para narrar me dejo subyugar con el sentir, el parecer, el observar...

Redondez cual el mundo soportas los embates de la furia arrasadora del canal.
Donde paran tus aguas aleteando, dónde dejar de existir para convertirte en evaporación, en ausencia?

Cuidando la ortografía me instalo en las palabras. Aquellas que me fueron dadas, aquellas que me van surgiendo y surtiendo de las ideas de la emoción, del encuentro con la emoción. Y en tus disgregaciones infinitas sales al encuentro de tí, natura fuente de toda verdad que defines en una imagen al paseante libre de toda verba que sobrándole las fuerzas la deja fluir ignorante. 
brota de tus entrañas la fuerza que ahoga mi voz en llanto de emoción reprimida y me ahoga en palabras vanas.
Se agolpan los seres cual insectos chupasangre buscan el fluído, el calor, la energía de la vida para existir. Sus pintitas de colores se pierden en la espesura del dorado que emerge tras la corriente. Desead por una vez que tus colores fluyan hacia aquel lugar donde evaporan tus fluidos en refrescos manantiales la mañana.

Desea que la tarde se haga voz para encontrar el canto que acompañe tu ritmo, San Antonio, dulce frescor del ocaso.
Deseosos saludas! Qué imágenes percibes en las alturas, donde tus pequeños placeres de superioridad se encuentran con la fascinación del cielo, donde los pájaros te cuentan ínfimas anécdotas de emociones perdidas? ..
Y en las profundidades del lecho estabas agazapado, buscando las microscópicas sustancias que te provee la riqueza de mi tierra. Allí yo me aparecí para destruir tu mundo encantado de soledades de piedras negras, chillar de cigarras molestas, piar de nuevos amaneceres y cantos incesantes.
Grotesco monstruo del río, sales disparado con tu corpachón negruzco, confundido entre las piedras, rastreas el fondo que has transitado miles de veces esperando encontrar vaya a saber que nuevas celosías que abran otros mundos.
Y te encuentro en ese estado, deliberadamente abierto al encuentro con el nuevo mundo, el lugar virgen   de  tu mirada acusadora de los tiempos reclama Vida!
Tiempo para vivir y sentir como los huesos se desperezan al contacto con el aire, cómo la  vista da lugar a la mirada y deja transitar la ensoñación, cómo la respiración se abre y el aire enriquecido de tu verde ingresa a mi sangre sórdida. Tiempo para verte crecer como veo desarrollar la madreselva perfumada del jardín de mis encuentros con la vida, allí donde las tardes me habilitan el pensamiento, siento que te debo el alma, siento que la pobreza de mi corta pericia para la entrega dejó truncado tu pobre corazón lleno de ansias. El tiempo que se asoma esta mañana aquí donde el reloj de arena suspende sus partículas flotando en la alegría necesaria.
 Qué bueno encontrarme hoy on el tiempo necesario para perder... Poder concentrar las energías en perder, dejar las ganancias para el pederasta de la vida  que arrebató el silencio al desgarro de la infancia. Las ganancias perdidas del idiota que no ha encontrado la resolana de la tarde, la paz del ocaso, que realmente se ha perdido en el afán especulativo.
Dejarme llevar encontrando las palabras adecuadas que me estremezcan el alma, que logren la emoción de clavarme un puñal allí bien adentro de las entrañas ara poder liberar del todo estas ganas de gritar y patalear y revolcarme... Y vivir...
Qué bueno! Que las mejillas se me empañen de todo lo que hay para decir si al decir lo que es tan propio se confunden las voces del origen, me asaltan las palabras que olvidaste hace años cuando olvidaste lo que era vivir.

Y mi interlocutor a cambiando constantemente y le hablo a la natura prodigiosa que se esmera en conmoverme, que me ve al pasar inconclusa y se esfuerza en dar completud a la miseria existencial y a esta necesidad constante de tragedia, este afán fatídico



Y todos vivimos en la soledad de nuestras almas que no encuentran su camino a la felicidad. porque me miraste con un desliz y aparte tu mano de mis glúteos e instantaneamente el mundo cedió bajo los pies. Fue tu amor incondicional el que dejo de existir cuando sentiste el rechazo o mas bien la determinación de una necesaria autonomía y preservación de mí. De lo mío que es mi cuerpo y mi espacio para decir no a tan pocas cosas como dormir una siesta sin culpa a tu lado o leer sin dirigirte la palabra por una hora, o levantarme para salir disparada hacia el río sin tener que dar una explicación. Pero todo tuvo su consecuencia y su castigo: vos también encontraste el espacio de rebeldía para ausentarte de mi vida toda la tarde y darme el aire "que necesito". Y aquí estoy, sola, frente a la escritura y la tormenta. Con el intenso calor cordobés de las tardes frente al San Antonio, deseosa de que te despiertes para que con una mirada amorosa yo deje de sufrir esta acidez que me perfora el estómago, producto de la ansiedad que me provoca no saber como "ser". Y si en mi necesidad de "ser" me quedo sola, sola con mi maravillosa alma" para disfrutarla bien a pleno, sin rendir cuentas a nadie, pero sola. Sola para seguir contándome en mi nueva tablet lo sola que se puede estar
Te levantaste para no decir nada, pasar por mi lado ignorando mi dolor. Hacer que el amor duela es parte de la fantasía romántica de estar enamorado. Si no existieran estos pequeños desapegos cómo podría reconocer el instante en que vuelves a mi enamorado a la entrega que nos debemos para reconciliar el amor ?.


Al encuentro de la soledad

Y te embargó la pasión. La del niño que se empecina en lograr que sus personajes de fantasía cobren vida . Es el hambre de trascender que te encuentra día a día intentando asirte de pequeños desvíos del mundo para acercarte a un más allá que te ubica más cerca de la humanidad. Es el deseo irrefrenable de dejar de ser el trabajador, el padre de hogar, el hijo para pasar a representar el papel de las nobles almas del arte. Es tal vez, la inquietud que te hace expresar en un juego infantil y desquiciado la necesidad de ocupar el espacio. Es la necesidad de jugar, como aquí me encuentra dando paso a las palabras que no son más que un código de aquello que jamás se puede transmitir porque no hay lenguaje para el alma.

Será tal vez la poesía aquella responsable de mirar con otros ojos el sentir?

martes, 8 de septiembre de 2015

Tristeza

¿Quién podría comprender la tristeza del que óptimo y flamante

                                 anda por la vida?

¿Quién podría entender el deseo insatisfecho del desencanto

                                y el desencuentro?

¿Quién me explicaría la sensación infernal de la nada?

¿Quién se compadecería de la soledad que provoca mi compulsión

                                 abrumadora?                                             

                                Descalabro del alma.

lunes, 22 de junio de 2015

Escatología.









La necesidad de salir corriendo y encontrar algo que lo anestesie y lo sumerja en un dulce desvarío, o un dolor profundo. Despedir los gases de la podredumbre interna, como quien despide a los muertos con los que carga, como quien se deshace de la materia putrefacta del recuerdo para limpiar los intestinos del alma.  El  malestar físico de hinchazón, de cosa indeseable que puja por salir para terminar de desprenderse del cuerpo que aloja y transmutarse en simple olvido. Un dolor de entrañas que traduzca el dolor incomprensible del ser y no ser por la falta del escarnio. Un dolor espontáneo y natural que se exprese anónimo y fugaz que persista en su acidez maloliente y te diga instantáneamente que todo es una mierda.
Salió a la rutina diaria, al enfrentarse a la falta de sorpresa, a la inmutabilidad de los cuerpos sujetados de dolor y las carencias de contracciones espasmódicas reflejas. Salió contrahecho y constipado a una realidad de mohindades involuntarias.  
La soledad  recubre  atenta y temerosa el silencio.  Oscuros demonios aprovecha a ganar territorio contaminando el cuerpo que está por estallar y ¿cuándo reviente? ¿Qué será del parásito que se aloja y pervierte el deseo, qué será de ese cuerpo destripado y cancerígeno?
Al dar vueltas a la esquina el niño que no fue soltó las riendas de la compostura y la  diarreica imbecilidad se hizo presente como una excusa, como un desafío frente al fantasma.
 Evacuado el atracón de perversiones dejó salir la angustia, creció de golpe para aceptar el hijo que se marchitó, el padre que deseo ser, la mujer que tal vez nunca llegó, el  inalcanzable modelo, el amigo que no conoció. Todo el universo de fantasías absurdas se contrastó con una realidad estática. El ciclo digesto debía continuar y el proceso tomo otro curso: enemas esotéricos una vez por semana.  



martes, 2 de junio de 2015

Vida




La vertiente acaricia la piedra

sufriente del golpeteo incesante.

El cactus fructífero se rebela

y las flores silvestres arremeten.

Los frutos generosos de la tierra

y sus bestias mansas en espera

Tu mirada, mi cuerpo

y el cielo atónito que nos contempla.

Infundada, enfundada de dolor







La tristeza inconcebible del desencanto me obliga a pensar mil veces en aquello que no pudo ser. No pudo ser la armonía del encuentro, ni la alegría de estar juntos. No puedo ser amarse en la felicidad del compartir porque el compartir era demasiado para aquellos que han vivido en la desesperanza y la soledad. No puedo ser el reconciliarse con la vida porque la dureza de los golpes ya habían creado una llaga  demasiado grande pare ser cicatrizada con sutilezas. No pudo ser y pareciera no será porque ya es muy tarde, porque se pasó el tiempo de enseñanza y solo queda el tiempo de lamentos y recuerdo que no están y no se pueden inventar. La esperanza de un nuevo tiempo de olvidos de las miserias siempre esta presente y no llega. Despierto el día para renovar mi compromiso con la vida de llevar un poco de alegría a mi eterna melancolía que me impide pensar en otra cosa que no sea mi maldito sufrimiento. El ser torturado se requiebra y solo  y se deshace en un mar de llantos infundados. Llorar a lágrima viva, llorar hasta desvanecerse, llorar por llorar y que el agua de mis ojos laven las heridas invisibles del quebrantado. El dolor viene de las entrañas sin responder a nada cierto, todo es confuso y caótico, mucho dolor e incertidumbre que apelmaza la energía de estar vivo. Explicar el gran misterio de la tristeza puede ser una tarea fácil cuando enviamos en una aerostático de luz los deseos frustrados a otro espacio, el ajeno, el del pobre lastimero. Y no tengo fuerzas para decir basta, Me quedaría el día completo arrumbado entre las colchas esperando que un espíritu me empuje al mundo. No quiero salir más. Solo quedarme entre las colchas y llorar. Llorar y sacar este dolor de las entrañas para que no vuelva más. Olvidarlo en una esquina de mi alma para decidir el día en que le damos un paseito por la melancolía. Cómo explicar la tristeza frente a una vida de oportunidades,  acá tirada en la cama, como explicar la tristeza infundada. 


That's a question!




Apenas lo digo, apenas lo escribo deja de existir...
Cuál será el poder mágico de la palabra que exorciza los dolores dejando apenas un recuerdo de un mal momento?
Cómo procesa el pensamiento las marcas dejadas por las ideas volátiles del ensueño?
Dónde quedaron las oscuridades recientes plenas del infierno de lo objetable?
A dónde se fue mi alma pura y enérgica a buscar otros placeres?
Por qué es tan difícil concentrar la mente en otros mundos y dejar de ser un enajenado?
Dónde quedó esa joven soñadora que abstraía su cuerpo y mente tras las hojas ficcionadas?
Cuáles son esos temas tan serios que embargan el sentir por el decir?
Qué obligaciones quitan los pensamientos eróticos y los llenan de basura trivial?
Por qué la necesidad de recibir amor nunca se corresponde con igual cantidad de entrega?
Qué me hace tan mísera frente al festejo de estar vivos?
Dónde se oculta mi alma para evitar el enfado de las frustraciones?
Cuáles son los deseos aún no descubiertos que generan la desdicha?
Quién tendrá el poder de decidir cuándo la vida se me entregue en todo su derecho?
Qué limita mi derecho a disfrutar de todo lo conquistado?
Cuándo la herencia pervirtió las tradiciones añoradas?
Qué valores paternos quiero como sustento de mis generaciones?
Qué alimento pernicioso se apoderó de mis entrañas dejando mi espíritu desnutrido?
 Por qué el dejar, el encontrar, el ocultar y el demostrar son sobrevalorados en mi mundo discursivo?
Dónde quedó el sentir, el disfrutar, el vivir, el respirar en la curva de las emociones autoimpuestas?
Qué habrá detrás de las conexiones neuronales que me obligan a solventar estos pensamientos?
Por qué no puedo dejar de pensar y sufrir?

Instalo una idea.

domingo, 25 de enero de 2015

Bajan.. el cielo se oculta sin vos

Como ciertamente el hombre no está solo con su alma aunque esto sea todo lo que desea; cuando  se pone a andar en tiempo vacacional una comitiva de secuaces del consumo lo acompañan prestos a su desgracia. Avanzabas locuaz y divertido, haciendo gala de las resoluciones más ingeniosas y las anécdotas llenas de floridos remates, contadas una y mil veces. Sospechaste el fatal reviente inesperado y te largaste súbito, como el ave que esquiva su trágica estampa contra el parabrisas. Resoplaste. Tu mirada se clavó en la mía y en el camino.  El silbar de los acompañantes de ruta se transformó en un arrasante flujo de energía cinética absorbente. A los pocos minutos el viaje se transformó en el camino hacia la confirmación de un destino inapelable. La llave cruz  su estigma.  Si hay una resolución probable Dios existe.  

sábado, 24 de enero de 2015

Nono

El pecho de la tierra, Ñuñu, entrega al viajante su fruto desinteresadamente. Cual oferta magnánima sus dulces son la concentración de las delicias y placeres de los hombres. La mirada atenta del naturalista ocasional queda asombrada en el descubrimiento subrepticio. ¿Será tal vez que ella se me muestra recordándome la simpleza de las cosas vivas, el transir de la vida y el florecer de lo árido?  ¿Será tal vez que en su pequeño gesto me recuerda que detrás de tanto yuyo insulso?  Detrás de las espinas lastimosas del bosque oculto a la mirada del ingrato se entrega la dulzura morada solo a aquellos dispuestos a sacrificar su sangre por la Pacha. Y en sus ramas, venas cargadas de la sangre de los mortales fluye la savia de la vida y transforma el sufrimiento en dulce néctar de los dioses originarios.

jueves, 22 de enero de 2015

Flor serrana

Flor de la serranía que orgullosa te despliegas entre los macizos grises, podrán tus perfumes esconder la melancólica ensoñación de estos días?  Podrá el cantarino curso que te acaricia silenciar los desgarradores llantos mudos de mi alma? Será tal vez en la altura de tus bosques donde se oculta la razón y la sospecha de los días?  Es el  pino añejo el depósito de la savia ancestral de los orígenes olvidados? Te encuentro paciente, solitaria y en quietud, a la espera indecisa de la lujuria suburbana, deseosa del encanto de las urbes y el vértigo de los tiempos insensibles. Por qué tu cronos insatisfecho no conforma con el espacio la dimensión cósmica del más allá deseado? Por qué al encontrarte me pierdo en tus deseos metropolitanos?

viernes, 16 de enero de 2015

¡Hermandad!


Hermanados se entregan a la travesía oscura
Enlazados esperan el arrecio de la bendita tormenta
En soledad con la pampa se encuentran desnudando sus raíces
Bebiendo la savia compartida crecen intuyendo la nostalgia
Abrumados de nervaduras añoran las ausencias 
Y se instalan en ejercer la vida
Absorben el rocío permanente de su flujo
Renuevan con brotes lo perdido
Abonan en un instante el presente
Y sienten !

domingo, 4 de enero de 2015

Lutero y la Duda


Vertiente


Porque existe en el cielo 
Tu mirada y tu alma 
Porque sin el dios de la vida
El mundo carece de estrellas
infundo la verba aséptica ...
Y seré el agua que bebes
Y seré el aire que respiras
Y seré todo y seré nada
Cuando ya no quede nada
Cuando el polvo se reduzca a un recuerdo
Cuando lejos me hayan quedado tus palabras
Cuando el recuerdo de los míos no me alcance
Cuando mi Alma rasgue el infierno de soledades
Cuando el eco de tu sabiduría imberbe encienda las verdades obturadas
Renaceré en el brote de los juncos
En el brillo de las aguas turbias
En el sonreír inocente del que ve pasar el arácnido hiriente
Recuerdo de la materia ausente
Presencia obtusa de energía obscena.

Stunt


Cuando desfallecen las fuerzas y arrecia el desencanto es la puja de tu entusiasmo arrollador que me devuelve la voluntad robada. Cuando mi búsqueda de aventuras nuevas no encuentra adhesiones son tus ideas alocadas que renuevan la fantasía. Cuando las lecturas enajenaron mi alma son tus cuentos pueriles los que renuevan mi mirada.  Cuando la valentía para enfrentar la vida se desmorona son tus lanzados bracitos al vacío que advierten la cobardía. Cuando la  memoria   intenta borrar las emociones son tus veintidós años de amor que nos recuerda el nacer de una familia.